Las aguas termales del balneario de Carballo están clasificadas como aguas minero medicinales, sulfurado sódicas bicarbonatadas, de mineralización débil. Emergen a una temperatura de 42 °C. Fueron reconocidas por el Tribunal de Aguas de París como una de las mejores de Europa a finales del siglo XIX y declaradas de utilidad pública en 1928.
Las aguas del Balneario presentan un alto contenido en azufre, sodio y bicarbonato, aunque también existen otros elementos en menor concentración, no por ello menos importantes, como el cloro, flúor, etc. Son incoloras y transparentes, si bien en grandes cantidades adquieren una coloración azulada verdosa. Debido a su alto contenido en azufre, tiene el típico olor a “huevo podrido”.
Las aguas mineromedicinales del balneario de Carballo son tanto un recurso terapéutico para tratamiento de diferentes enfermedades, como un complemento para la prevención de las mismas.
Sus principales indicaciones son:
Afecciones del aparato locomotor que pueden ser:
Afecciones de vías Respiratorias
Además de estas indicaciones, existen otras tales como retraso de envejecimiento, tratamientos de reposo y antiestrés, procesos ginecológicos, afecciones quirúrgicas, afecciones hepáticas y entero hepáticas, trastornos metabólicos, vías urinarias y odontoestomatología.
Las contraindicaciones generales son:
El equipo médico establecerá el tratamiento definitivo según la patología del paciente y pone a su disposición el correo electrónico serviciosmedicos@balneariodecarballo.com para aclarar posibles dudas.